Cuando Isa me escribió que escribiera para su blog, mi mente hizo un restart y todo se fue en blanco por unos segundos. ¿De qué podía hablar que estuviera al nivel de La Novia del Pastor? Estaba intimidada porque Isa es una de mis autoras favoritas. Luego Isa me dijo que hablara de la soltería y créeme si de algo yo sé, es de soltería. El #ForeverAlone era casi insigne en todas mis redes sociales.

Mi tiempo de soltería me enseñó demasiado y ahora que tengo pareja entiendo por qué estuve tanto tiempo #ForeverAlone.

  1. Ya eres amado:

    En mi soltería aprendí que Dios ya me ama y sentir ese amor tan profundo por ser exactamente cómo soy me liberó de estar buscando amor a medias. NADIE me va a amar más de lo que Dios ya me ama.

  2. Primero me tengo que amar yo:

    Cuando comencé a experimentar el amor de Dios, me di cuenta de que la primera que no se amaba era yo. No amaba quién era, lo que hacía ni cómo me veía. ¿Quién me hace pensar que otro me va a amar más de lo que yo me amo?

  3. Estar solo no es malo:

    Recuerdo hace unos años (en mi etapa de Tumblr emo) una de las frases que me repetía era: no me gusta estar sola con mis pensamientos, son muy oscuros. Odiaba estar sola y esperaba de mis amigos y de una posible pareja que estuvieran dispuestos a estar a mi lado 24/7. ¡IMPOSIBLE! Recuerdo un día que todos mis amigos estaban ocupados y les recriminé por no estar disponibles para mí hasta que uno me dijo: “estoy aquí en mensajes de texto, pero no puedo estar contigo ahora. No me recrimines porque sí eres importante, pero me pides algo que no puedo darte”.

  4. La pareja ideal no existe:

    El amor perfecto se construye con muchas conversaciones incómodas y una que otra lágrima. No hay relaciones perfectas porque no hay personas perfectas, todos tenemos defectos.

  5. La única persona responsable de tu felicidad eres tú:

    Pasarle esta responsabilidad a tu pareja pondrá una presión enorme en sus hombros y nunca logrará hacerte feliz por más que intente. Si tu no eres feliz, nadie te podrá hacer feliz.

  6. El amor no se trata de ti:

    Si entras en una relación porque necesitas amor, solo terminarás decepcionado.

  7. Dios no te va a dejar solo:

    Por muchos años, vivía con esta ansiedad de que estaría soltera para toda la vida, hasta que comencé a descansar en la verdad de que Dios nunca me va a dejar sola. ¡Él siempre está!

  8. No necesitas una pareja para servir a Dios:

    Muchas de las mujeres que admiro están casadas y su ministerio gira en torno a la vida en familia y sus parejas. Esto no es malo, lo malo es creer que nuestro estatus civil determina cuánto podemos hacer para la comunidad de la iglesia.

  9. Qué verdaderamente te apasiona:

    Antes de entrar en una relación puedes experimentar con todas las ocupaciones y pasatiempos que te interesan y descubrir cuál verdaderamente te apasiona.

  10. Cuáles son tus metas a corto y a largo plazo:

    En la Biblia leemos: ¿andarán dos si no estuvieran de acuerdo? Esto aplica para las metas individuales. Si buscas un acompañante de viaje, debes saber para dónde vas.

Mis años de soltería me prepararon para la relación y los amigos que hoy tengo. No te mueres de soltería. Aunque suene clichoso, la soltería es una etapa donde aprendes de ti y una oportunidad increíble de estar 100% disponible para Dios y todos sus llamados. Ya entiendo por qué Dios me hizo esperar tanto. Tenía mucho por aprender de mí y mucho que madurar emocionalmente.

Esto es solo una guía de lo que yo aprendí y lo que sigo aprendiendo. Dios no quiere que desperdicies ninguna etapa de tu vida.

Dary Collazo

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